NUESTRA ESTRUCTURA ENERGÉTICA

Estamos constituidos por un cuerpo y un espíritu que nos anima; o por una masa y una energía, si lo preferimos.
El cuerpo lo conocemos muy bien con sus órganos y sistemas y podemos fotografiarlo, sacarle radiografías, tomografías, scanner, etc.
El espíritu o la energía los podemos intuir, percibir, pero no podemos, como al cuerpo fotografiarlo ni tocarlo, aunque ahora esto no es tan cierto ya que existe la fotografía Kirlian que fotografía el aura, la irradiación energética de nuestro cuerpo.
De estas dos partes una es siempre la más importante; el espíritu es el que anima al cuerpo y cuando lo abandona el cuerpo muere y el espíritu, para algunos sube a lo alto, para otros se reencarna, pero para todos está claro que no desaparece con el cuerpo.
Y sin embargo nos ocupamos mucho más del cuerpo.
Para la Medicina Integrativa ambos son importantes. Algunas formas de esta energía la podemos encontrar en los meridianos de acupuntura, en los centros energéticos y el equilibrio en que ellos estén nos va a mostrar con mayor certeza nuestro estado de salud.
Nuestro Espíritu y esta energía que nos mueve está influenciada por nuestras actitudes, nuestros comportamientos, nuestra manera de comer, de trabajar, de amar, de vivir.
En suma, nuestra salud es mucho más dependiente de estos factores que de otros y muy probablemente la enfermedad de nuestro cuerpo es secundaria a la enfermedad de nuestro Espíritu.

“Nuestra Salud Física depende mucho más de
lo que creemos, de nuestra Salud Espiritual”